Connect with us

Departamento

Terror en la pared

Published

on

Habitantes del corregimiento de Guáimaro, jurisdicción del municipio de Salamina, han mostrado su preocupación por los grafitis que aparecieron el pasado miércoles en la fachada de una vivienda. «AGC Presente. No queremos rateros ni cuatreros», es el mensaje que se lee.

Los grafitis están firmados por las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) denominadas ‘Clan del Golfo’.

En diálogos con Opinión Caribe, el Antropólogo, Lerber Dimas Vásquez, dijo que los grafitis que impusieron actores armados en los territorios hacen parte de un lenguaje que representa varias formas de violencia y funcionan como un instrumento de comunicación que cualquier persona puede leer así no tenga contexto de referencia. Ej.: la sigla AUC.

Además, asegura que la estrategia AGC., es compleja, pero no es política. “Es vengativa, reformista de un nuevo orden y mafiosa, que emplea la violencia como único mecanismo de control y dinamismo social. Se basa en el miedo y en el terror, cuyo referente sigue siendo validado en los territorios”.

Dimas Vázquez, le hizo un llamado urgente al gobernador del Magdalena, Carlos Caicedo.  “Esto no es de: yo te pido, tu no me das, tú me bloqueas, yo te ataco, tú me visitas, yo no te atiendo. Aquí estamos perdiendo todos y todas. Un llamado sensato a afrontar este problema con liderazgo y propuestas”.

 Recuento Histórico

El proyecto AUC se dice que empezó fuerte en Pivijay y allí se crea uno de los frentes más importantes que tuvo el ‘Bloque Norte’ que se llamó el ‘Frente Pivijay’, y donde estuvo al mando ‘Rafa Pivijay’, entre otras personas que fueron los responsables de las masacres de los pueblos Palafitos y Guáimaro. Esto de alguna manera va a conectar un poco la relación del paramilitarismo que hay en toda esta región.

“Digamos que más o menos hacía 1998 se da un tema bien importante dentro del proyecto paramilitar y es el “Acuerdo del Nudo de Paramillo”, básicamente lo que hace este acuerdo es que nombra el proyecto AUC y este tiene un mecanismo de expansión que se llama “Bloque Norte”, entonces digamos que en el departamento del Magdalena ya habían otras estructuras paramilitares que estaban funcionando anteriormente, como el caso de Hernán Giraldo en la Sierra Nevada, el caso de Los Rojas en Fundación, Ciénaga, Aracataca, El Retén y Palmor de la Sierra, es decir, era su zona de influencia; y en Sur del Magdalena, las autodefensas de ‘Chepe Barrera, en los municipios de Los Andes, Santa Ana y todo ese sector, dijo.

De acuerdo con Lerber Dimas Vásquez, cuando el proyecto de las AUC empezó en el año de 1998, se dio en el Magdalena, junto con una estructura de otros proyectos ya existentes del paramilitarismo en el departamento.

“Este proyecto de las AUC tiene algo en particular y digamos en la forma como se dio. Las FARC casi matan a Carlos Castaño en casa verde y a partir de ese momento Castaño decreta una orden general y es que las estructuras paramilitares tienen que golpear las bases de la guerrilla y se asume que las bases de la guerrilla son los campesinos o la gente que les están colaborando”, aseveró.

La primera masacre que se cometió en el departamento del Magdalena y bajo esta orden es la del Playón de Orozco.

Cabe recordar, que en enero de 1999 un escuadrón paramilitar irrumpió en esa población y asesinó con tiros de fusil a 30 personas. Hombres, mujeres, niños y ancianos, abandonaron sus casas y parcelas convirtiendo al corregimiento en un pueblo fantasma.