Columnistas
Petro y el vuelo en Kfir
No sé, si para ustedes sea comprensible que una persona que enfrentó a la fuerza Pública con las armas y uniformes ilegítimos durante su militancia en el M19, fue juzgado por la Justicia Penal Militar, contradictor de la seguridad y defensa de todas las políticas proyectadas por los gobiernos de turno en materia de seguridad, que en mi parecer jamás se le vio respeto, aprecio o reconocimiento alguno por los hombres y mujeres que lo defienden.
Haya logrado en menos de dos meses, solo por ser el presidente del país hacer que el sueño de muchos se haya hecho realidad, montarse en un avión de combate Israelí Kfir y sobrevolar los cielos colombianos como lo hizo en días pasados Gustavo Petro en el Comando Aéreo de Combate No1 CACOM1, Capitán Germán Olano, ubicado en Palanquero Municipio de Puerto Salgar, invitación realizada por el comandante de la fuerza bajo una preocupación responsable.
Lógicamente, si es comprensible esa acción, si partimos de la base que el artículo 189 de la CPN le asigna las funciones en el enciso numero tres “dirigir la fuerza pública y disponer de ella como comandante supremo de las fuerzas armadas de la república” y cinco “Dirigir las operaciones de guerra cuando lo estime conveniente”; entonces, conocer y entender las debilidades y fortalezas del país en materia del Sistema Integral de Defensa Nacional SIDEN es algo que debe asumir con mucha responsabilidad, sobre todo cuando existen 61 conflictos internacionales entre ellos la guerra de Rusia – Ucrania o los recientes misiles que lanzó Corea del Norte.
Es posible que ahora que llegó a la presidencia, comprenda que Colombia necesita mínimo tres escuadrones de combate y cada uno requiere de 15 aviones para garantizar una respuesta apropiada, para defender el espacio aéreo en dos escenarios simultáneos y los Kfir que tiene la Fuerza Aérea fueron fabricados en la década de los 70, llegaron de segunda al país en el año 89 hoy considerados multirooll gracias a las tres modernizaciones que le han hecho, sin embargo, no se puede olvidar que Samper, Duque y Pastrana también se montaron en los aviones, hasta donde se conoce.
Cobra vigencia e importancia entonces, la acción del gobierno de Duque que desarrolló un avance significativo en el proyecto de adquisición de aeronaves de superioridad aérea con países como Francia, Estados Unidos y Suecia para analizar una futura compra de aviones, la misma que fue criticada por Petro y sus congresistas de izquierda, dejándose intimidar en su mandato por los medios de comunicación sin asumir una medida impopular pero necesaria, entregando su mandato sin dejar firmado la compra de los aviones ante un proceso administrativo que viene desde el año 2012.
Es importante recordar, que la Fuerza Aérea Colombiana al igual que la Armada Nacional, la Policía Nacional y el Ejercito Nacional, desde la posesión del nuevo mandatario, tienen el deber de presentarle al nuevo presidente su organización, limitaciones y necesidades, porque en últimas es él, quien tiene el deber de atender los requerimientos para garantizar la misión constitucional de mantener la soberanía nacional de los colombianos.
Por consiguiente, mas allá de las burlas, memes, críticas e incomprensiones sobre sus ejecutorias en tiempos pasados y ahora, hoy por “elección popular” es el presidente de los colombianos y la responsabilidad que tiene es ineludible e intransferible, lo importante es que como máximo comandante asuma y responda honestamente en apoyar una necesidad sentida de la cual será juzgado si llegado el momento no tenemos una capacidad de respuesta apropiada.
“El camino puede ser difícil, pero con su ayuda lo podemos lograr” soy ciudadano.