Connect with us

Columnistas

¿Y quién prendió el fuego?

Published

on

Por Víctor Rodríguez Fajardo

La isla de Salamanca arderá hasta que no quede un árbol, grama o arbusto que se queme, sin que las autoridades atiendan su origen. Ya los incendios forestales en este parque nacional hacen parte del diario vivir, una zona que tiene un cuerpo de agua que la rodea, sea por el mar Caribe o por la ciénaga  lo que permite una vegetación llena de vida y que no debería ser fácil la propagación de un incendio en este sector. Las imágenes que tenemos de satélite muestra un alto porcentaje de pantano y ciénaga donde germina la capa vegetal. Por esto, no es difícil de pensar que los incendios reiterados durante los últimos años obedezcan a la acción de manos criminales y no por combustión espontánea.

El sacrificio de nuestros bomberos los coloca en la categoría de héroes olvidados quienes sin contar con el apoyo presupuestal debido, actúan con arrojo y decisión para intentar controlar este desastre ambiental contra la fauna y flora de una de los parques nacionales existentes en el departamento del Magdalena.

Los bomberos, héroes abandonados por la gobernación y las alcaldías quedan solos ante este reto, no hemos presenciado acción alguna desde la gobernación del magdalena para aunar esfuerzos sea de recursos o gestión ante el gobierno nacional para tener bajo control este territorio. Lo mismo sucede con otras instituciones como ministerio de Defensa, recordemos los kilómetros cuadrados de la isla de salamanca, tienen en su antecedente incursión paramilitar no solo para atentar contra la vida de lugareños sino de tenencia de tierra, hay jefes paramilitares a quienes se les atribuye propiedad en la isla. La Armada debe ser clave, muchos hablan que por esas playas salen cargamento de drogas, ya hemos dado noticias al respecto que confirman la operación de bandas criminales en este sitio. El ejército debería hacer presencia sí es de importancia para el país un parque nacional. Por supuesto la misma Unidad de Parques debe hacer la gestión, llamar la atención del Congreso, convocar escenarios para el debate y el emprendimiento de acciones para detener ya este flagelo.

Nos rehusamos a creer que el persistente incendio se deba a ocasionales leñadores o espontáneos cazadores que no han podido ser detectados, serían muy crédulos y hasta sospechoso sí así piensan desde la institucionalidad.

Otra línea a tener en cuenta, la creciente línea del casco urbano del corregimiento de Palermo. Al ir desapareciendo el parque natural va creciendo la hectárea de tierra a urbanizar. Muy pronto Palermo será erigido municipio con vocación portuaria y lo que necesita son tierras que puedan ser usadas como puerto seco, zona franca y patio de contenedores con lo cual el valor de la tierra se cotiza en dólares.

De momento, solo es noticia a nivel nacional cuando desde los altos edificios de Barranquilla se graban videos o tomas fotográficos con espectacular perspectiva generando imágenes que a la distancia no revelan el tamaño del problema, solo cuando el humo ocasiona su tenebrosa contaminación, entonces se encienden algunas alarmas. Hoy barranquilla actúa como doliente ante el silencio del Magdalena. Ojo, desde allá hay interés de anexar a Palermo a su área metropolitana.

Dejamos las preguntas para que pensemos:

¿A quién beneficia esta quema?

¿Este crimen ambiental seguirá impune?

¿Cuál es el futuro de Palermo?

¿Qué Bacrim opera en el sector?

 ISí es difícil el control de un territorio que está a la vista de todos, plano, entre dos ciudades capitales, no quiero imaginar cómo será la ausencia del Estado en la alta Guajira o entendería porque no han podido someter un territorio como la troncal del Caribe y la Sierra Nevada de Santa Marta.

 

Click to comment

You must be logged in to post a comment Login

Leave a Reply