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Hinchas del ‘ciclón’ vivieron fiesta futbolística y el sabor amargo de la derrota

Eran las 3:00 PM y todos los caminos conducían al estadio Sierra Nevada de Santa Marta para ver uno de los juegos más importantes de las últimas décadas entre el Unión Magdalena y el Junior de Barranquilla.
El trancón se hacía interminable en las vías de acceso hacia el estadio, los reguladores del tránsito hacia presencia para intentar controlar la situación.
Los hinchas ‘bananeros’ fueron los protagonistas de la fiesta que se vivía alrededor del Sierra Nevada, la barra más reconocida del Unión la ‘Garra Samaria Norte’ fue la encargada del festín al momento de la llegada de los buses de los equipos protagonistas.
Se vivía un ambiente en familia, un ambiente sano, los aficionados del ‘ciclón’ estaban muy ilusionados por el estilo de juego que venía mostrando su equipo y por los dos partidos en línea que le habían ganado a su rival de patio, el conjunto ‘tiburón’.
El estadio, un poco retirado de la ciudad, es una zona en la que no llega muy bien la señal de ningún operador de telefonía móvil, en los alrededores hay mucha vegetación y maleza, lo que da una mala apariencia al sitio pues suelen ser entornos propicios para los animales.
Al momento de ingresar a la grada, los policías revisaban hasta las medias, no permitían usar correa, como es común en este tipo de eventos, el proceso de acceso al escenario deportivo se volvió lento por el lector de códigos QR con el que se verificaba la autenticidad de la boleta que en ocasiones fallaba.
Un mar de personas abordaba las entradas a las gradas del estadio para ver el partido más atractivo de ambos equipos en los últimos tiempos. Al momento de ingresar a estas, era envidiable a la vista el espectacular marco que se veía, con unos colores que predominaban más que el verde del campo de juego, el ‘azulgrana’ que adornaba el cielo y la silletería del estadio.
En el inicio del partido el conjunto barranquillero fue el dueño absoluto del juego, atacando en bloque hacia el arco que defendía el equipo magdalenense. El local también atacaba, pero en el primer tiempo de partido no hubo situaciones claras de gol.
El tiempo pasaba y los hinchas samarios no dejaban de alentar a su equipo que con ese empate parcial era finalista de la Copa.
Llegaba el entretiempo y los seguidores samarios departían en un excelente ambiente, con sonrisas y festejos en sus rostros recibieron el segundo tiempo.
El ambiente cambió drásticamente al minuto 70 del segundo tiempo, cuando el argentino Fabián Sambueza anotó el gol que igualaba todo y apaciguó la alegría en el Sierra Nevada.
Sonó el pitazo final del partido y los rostros de todos los hinchas locales eran de angustia y preocupación puesto que el partido entraba en la definición desde el punto penal.
La tanda de penaltis la inició el delantero del conjunto barranquillero Edwin Cetré, anotando el primero para su equipo, posteriormente Ricardo ‘el caballo’ Márquez erró el primer penalti para el Unión, pero lo volvió a cobrar porque el VAR advirtió que Viera se había adelantado, en el segundo intento de Márquez sí convirtió y la tanda estaba empatada hasta que en el tercer penalti para el equipo ‘azulgrana’ lo erró Juan Vacca; el juniorista Carmelo Valencia anotó el cuarto penalti junto con Jonathan Lopera para el ‘ciclón’. El cobro definitivo lo convirtió el ídolo de Puerto Colombia Carlos Bacca, llevando a una final más al conjunto de ‘La Arenosa’.
Los rostros de desolación y aflicción eran los dueños del protagonismo, pero esto no duró mucho tiempo, pues la hinchada se levantó de sus asientos y enalteció y agradeció mediante aplausos y coros a los jugadores que entregaron todo en la cancha y en lo que va del semestre convirtiéndose a la fecha en uno de los mejores equipos en Colombia.
En la salida del estadio volvió el caos en las vías que comunican al a este con las carreteras de la Troncal del Caribe y la Vía Alterna, cientos de carros y motos pitaban para poder desenredar el nudo que había porque todos querían salir al mismo tiempo y rápido, el trancón duró aproximadamente dos horas y hacía denso el flujo de transporte en ese sector de la ciudad.
A pesar de la derrota, el equipo y la hinchada tienen claro que el objetivo es mantenerse en la A y no volver a esa segunda división del fútbol profesional colombiano, cuya sombra ha perseguido al Unión desde aquel celebrado ascenso en diciembre de 2021. Fue una derrota, justa para algunos, injusta para otros, sin embargo, los seguidores del ‘ciclón’ mantienen vivo ese deseo de apoyar al equipo que tanta esperanza les ha dado en este segundo semestre del año.
Ahora, los ‘bananeros’ se concentran en el siguiente partido de la Liga, el próximo 17 de septiembre contra los Jaguares de Córdoba, con la seguridad de tener al paso a un grupo robusto de seguidores que, gane o pierda, seguirá portando con orgullo los colores de la bandera.
“Vamos azulgrana, vamos a ganar, que está es tu hinchada que te va alentar”
