Columnistas
Pescando incautos

Por: Rubén Darío Ceballos Mendoza
Mucho y más ha sido el daño que han causado los gobiernos, o mejor, dictaduras de izquierda que, soportados en propaganda, publicidad y demás otras argucias, apalancan lo que sería para los pueblos un mejor futuro, desconociendo de plano lo construido, alcanzado y existente. Cuenta solo para ellos el porvenir que se tendría por delante con su excelente sistema, pleno de grandes fábricas propiedad de la sociedad, abundancia productiva, trabajadores orgullosos de su participación social y comunitaria, además de un largo, muy largo etcétera, para lo que el Estado (estrategia) construiría monumentales obras arquitectónicas para exaltar la grandeza de su sistema y la estoica entrega de sus líderes a los magnos ideales socialistas, esfuerzo cuya misión es hacer sentir en la población grandioso entusiasmo, inspiración y esperanza hacia el mañana; pero, los hechos les han demostrado siempre lo exactamente contrario; y en consecuencia, la población termina por sentirse frustrada al confrontar y darse cuenta de su pobreza y sojuzgamiento con la ilusa propaganda de bienestar y felicidad difundida por dichos dictatoriales gobiernos.
Actualmente, muchas de las autocracias existentes de extrema izquierda, que tozudamente continúan embelesando a sus sociedades con monumentales desfiles militares en los que hacen fieros sobre su potencial bélico y el despliegue de grandes espectacularidades con los rostros de sus líderes históricos y del momento, con lo que buscan seducir el ego de sus habitantes; pero en el fondo de tales manifestaciones, y lo sabe el mundo, lo que realmente subsiste es la gran necesidad de distraer a la población de las grandes carencias que sufren a diario sus comunidades y los altos niveles de corrupción existentes en las esferas oficiales; y a la par de lo cual, con la misma finalidad, sus autoridades gubernamentales transmiten a diario información negativa y plenamente manipulada acerca de la “fragilidad e inmoralidad” de lo que acaece en los países occidentales, con la idea de generar una permanente aversión contra las democracias capitalistas.
En tales países, siempre soportados en grandes montajes publicitarios en los que muestran sus supuestos grandes logros socialistas, privilegian una propaganda que busca inculcar orgullo basado en el nivel de desarrollo alcanzado y el resurgimiento económico de gran parte de su población, al tiempo de ofrecer a futuro alcanzar un modelo social igualitario; pero nunca difunden sus brutales prácticas represivas a las que someten a su población, así como los altos índices de corrupción existentes en sus niveles gubernamentales. Internacionalmente hablando, las autocracias de izquierda desarrollan multimillonarios despliegues de propaganda a través de diversos medios, difundiendo y apoyando información engañosa en favor de sus países y en contra de lo que denominan el ostentoso e inmoral sistema de vida en países capitalistas, buscando con ello desestabilizar a las democracias occidentales, a lo que suman campañas políticas conspirativas en otros países en favor de candidatos populistas “ultras”, además de regar información, frecuentemente irreal, acerca de sus propios logros sociales y económicos; buscando igualmente sus antidemocráticos, represivos y violadores líderes de Derechos Humanos y libertades al fin de cuentas, perpetuarse en el poder, sojuzgando a la población como si fueran simples entes.
Nunca alcanzarán y demostrado está, positivos cambios ni transformaciones, mismos que hoy requiere el mundo en manera importante, urgente y cuando más que necesario es romper moldes para ir tras mejores resultados y significativas como interesantes influencias sin medias tintas ni timideces, a efecto de marcar etapas en la búsqueda, procura y defensa de un mundo mejor, lo que debe ser hoy por hoy la principal de las tendencias en contexto de flexibilidades, que no posturas rígidas, cuadradas ni radicales; y menos, cuando nos hallamos en una dinámica internacional convulsa y agitada en la que vivimos y en la que hay que estar a tono respecto que se deben preservar muchas cosas que en lo global a todos identifiquen y ser mayormente posible empezar una gran era.
