Comunidad inconforme por fábrica ubicada en zona residencial

Los habitantes de la carrera 16 entre calles 7 y 8, del barrio Obrero, salieron a las calles a protestar por las molestias ocasionadas por las actividades que realizaban los empleados de una fábrica ubicada en zona residencial.

Jaime Luis Mendoza López, morador del sector, manifestó a OPINIÓN CARIBE que “desde que esos señores compraron esa casa (hace un año) montaron una fábrica de pegante de pisos y siempre están trayendo materiales como la marmolina”.

Según la comunidad, desde tempranas horas deben soportar la contaminación que generan los residuos de los materiales de construcción. “Tenemos entendido que eso produce un componente que es perjudicial para los pulmones y durante todo el día estamos tragando polvo. Además los andenes y las calles siempre están invadidas porque todo el tiempo están descargando cemento”, aseguró Mendoza López.

Así mismo, Miguel Barros Acosta, vicepresidente de la JAC del barrio Obrero, aseguró que “el polvillo que esta fábrica es tóxico y está afectando principalmente a los niños; eso produce irritación en los ojos, daños en las vías respiratoria y no lo podemos permitir en el sector”.

Al lugar llegaron uniformados de la Policía Metropolitana de Santa Marta adscritos al Grupo Ambiental y Ecológica quienes manifestaron que, al parecer, los propietarios de la fábrica no cuentan con la documentación requerida para su funcionamiento, por lo que el negocio fue sellado temporalmente mientras se cumplen los trámites correspondientes.