Metrópolis
Tasa de pobreza monetaria en Santa Marta se ubicó en 51%

En los últimos días, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística – DANE, emitió las cifras relacionadas con la pobreza monetaria y pobreza monetaria extrema en el país al cierre de 2021, en las que, una vez más, Santa Marta figuró entre las ciudades con la tasa más alta.
La información emitida por la entidad, que mide el comportamiento de 23 ciudades colombianas, indica que en la capital del Magdalena el 51% de los habitantes viven en medio de la pobreza monetaria, superada únicamente por Riohacha, que reporta un 51,6% y Quibdó, con 64,8%.
Entre otras cosas, el informe del DANE también reveló que, entre febrero y abril de este 2022, en el Distrito la informalidad se ubicó en un 62,3%, muy por encima del promedio nacional, cuya cifra es de 44,9%. Esto indica que, de 100 personas que trabajan en la ciudad, 62 lo hacen de forma informal, de acuerdo con la explicación suministrada por Santa Marta Cómo Vamos, convirtiéndose así en la quinta capital con mayor incidencia de informalidad.
El desempleo también supera la tasa de las 23 ciudades medidas, acorde con el documento, en el mismo periodo señalado el porcentaje de personas sin vinculación laboral fue del 13,4%, mientras que la cifra nacional es de 12,1%.
Teniendo en cuenta los números obtenidos únicamente en la región Caribe, Santa Marta quedó ubicada debajo de Montería y Riohacha y encima de Barranquilla.
Por otro lado, en el informe de Índice de Precios al Consumidor – IPC, la ciudad también destacó por tener el mayor incremento en el costo de vida durante abril de este año, al registrar una variación que ascendió hasta un 12,2%, frente al 9,23% que registró el país con tasa de inflación más alta de los últimos 21 años.
En este conteo, el segundo lugar lo obtuvo Cúcuta, seguida de Popayán, Florencia y Valledupar.
“En mayo de 2022, la variación anual del IPC fue de 9,07%, es decir, 5,77 puntos porcentuales mayor que la reportada en el mismo periodo del año anterior, cuando fue de 3,30%”, explicó el DANE.
Lo anterior, debido a la variación mensual que reportan “alimentos y bebidas no alcohólicas, así como alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles”.
“En mayo de 2022 en comparación con abril de 2022, la variación de las subclases que más aportaron al índice total fueron: carne de res y derivados (3,77%), electricidad (2,86%), comidas en establecimientos de servicio a la mesa y autoservicio (1,21%), arriendo imputado (0,57%), tomate (26,05%), arroz (5,23%), leche (3,50%), arriendo efectivo (0,46%), suministro de agua (1,43%) y comidas preparadas fuera del hogar para consumo inmediato (1,36%). Las subclases con aportes negativos a la variación fueron: papas (-18,13%), frutas frescas (-1,81%), plátanos (-3,68%), cebolla (-4,33%) y transporte intermunicipal e internacional (-2,91%)”, añade la entidad.
