Región Caribe
Realizan hundimiento de monoboya para formación de arrecife artificial en el golfo de Morrosquillo
Como parte del compromiso de contar con una infraestructura de transporte amigable con el medioambiente, el Instituto Nacional de Vías (INVÍAS) realizó el hundimiento de una vieja unidad de cargue de tanqueros monoboya (TLU2), la cual era operada por Oleoducto Central (Ocensa), y que a partir de ahora beneficiará a la comunidad pesquera de la región, con la formación de un arrecife artificial en el golfo de Morrosquillo.
“Estamos comprometidos con la conservación de la biodiversidad. Por eso, de la mano de otras entidades trabajamos en proyectos amigables con el medioambiente que, al mismo tiempo, traigan beneficios para la comunidad aledaña y que aporten a una mejor calidad de vida”, expresó la ministra de Transporte, Ángela María Orozco Gómez.
Este artefacto naval, de 12 metros de ancho, 12 de largo y un peso de 350 toneladas de acero, operó por muchos años para el transporte de hidrocarburos del país y hoy, al cumplir su vida útil y ser hundido, se suma a los 62 arrecifes artificiales más que yacen en el fondo del mar con el fin de crear ecosistemas marinos que puedan llegar a fortalecer la actividad económica de los pescadores.
“Esta actividad, enmarcada dentro de la política de sostenibilidad y el eje de comunidades sostenibles que adelantamos en la entidad, favorece la protección, regeneración y desarrollo de los recursos marinos y piscícolas, beneficiando así a la población pesquera del golfo de Morrosquillo”, expresó el subdirector de Sostenibilidad del INVÍAS, Jairo Argüello.
Por su parte, el director de Responsabilidad Integral de Ocensa, Camilo Rodríguez, manifestó: “La antigua TLU es parte de la historia de Ocensa y fue parte también del día a día de muchas personas de nuestra organización. Por eso, nos alegra saber que va a seguir sirviéndole al país y a esta región, ahora desde una perspectiva diferente, como base de un arrecife coralino que esperamos empiece a crecer sobre ella desde hoy, en el marco de nuestro programa de biodiversidad, servicios ecosistémicos y economía circular”.
Antes del hundimiento de esta monoboya, Ocensa e INVÍAS llevaron a cabo una socialización con representantes de las 8 asociaciones de pescadores de la zona, para que conocieran cómo se realizaría el procedimiento y cuáles son las ventajas que esto trae para el mejoramiento de su calidad de vida y la de su comunidad.
Durante el hundimiento se desplegó un equipo de casi 30 personas entre las cuales había buzos profesionales, operadores de grúa, mecánicos, marineros en cubierta, soldadores, enfermero hiperbárico, los cuales garantizaron la exitosa operación.
Es con hechos de corazón como este que el Gobierno nacional, a través del INVÍAS, sigue transformando vidas de los sucreños, así como en todo el territorio colombiano, con proyectos basados en la rentabilidad social, y ratifica su compromiso con el medioambiente en beneficio de las generaciones futuras.