Metrópolis
Comunidad Arhuaca y Unimagdalena rechazan el Asesinato de Wilfrido Segundo Izquierdo

Por medio de un comunicado, Mamos y autoridades tradicionales de la Lengüeta (Salida el Mar) de la comunidad Arhuaca de la Sierra Nevada, Universidad del Magdalena, el Cabildo Arhuaco Magdalena y La Guajira, la Asociación de Estudiantes Indígenas de la Universidad del Magdalena y la Plataforma de Defensores de Derechos Humanos, Ambientales y Liderazgos de la Sierra Nevada, expresan su más profundo rechazo y consternación ante el trágico asesinato de Wilfrido Segundo Izquierdo, miembro del pueblo Arhuaco y estudiante de la Unimagdalena, ocurrido en la tarde del sábado 10 de agosto.
Este acto de violencia no solo arrebata la vida de un joven lleno de promesas, que estaba próximo a terminar su carrera, sino que también hiere profundamente a las comunidades y atenta contra los derechos y la dignidad de los pueblos indígenas. «Este crimen constituye una violación flagrante de los principios de justicia, paz y derechos humanos consagrados en la Constitución Política de Colombia y en los tratados internacionales suscritos por el país», señalan.
En medio de la preocupante ola de violencia que azota a Santa Marta, con asesinatos diarios que enlutan a familias y a la sociedad, es más urgente que nunca tomar acciones decisivas para detener esta cadena de muerte y sufrimiento. La violencia no puede ni debe ser el camino que marque el futuro de nuestra ciudad ni de nuestros jóvenes que buscan un futuro mejor a través de la educación.
«Rechazamos la forma amarillista en la que se presentó la noticia asignándole el alias del «Guajiro». Wilfrido era un joven arhuaco comprometido con su formación para convertirse en ingeniero civil y así aportar al desarrollo de la Sierra Nevada armonizando la ingeniería occidental con el saber ancestral, llevando desarrollo sostenible y regenerativo a las comunidades de la Sierra Nevada», agregaron.
Por lo anterior, hacen un llamado a las autoridades competentes, en particular a la Fiscalía General de la Nación y a la Policía Nacional, para que realicen una investigación exhaustiva y transparente para identificar y llevar ante la justicia a los responsables de este crimen.
Estos organismos instaron al Estado colombiano a garantizar el cumplimiento del artículo 2 de la Constitución, que establece la obligación del Estado de proteger la vida y los derechos de todos sus ciudadanos, así como del artículo 11, que protege el derecho a la vida. Además, resaltaron la importancia del artículo 7, que reconoce la diversidad étnica y cultural de la Nación como fundamento para la construcción de una sociedad justa y equitativa.
En este contexto, es fundamental señalar que a través de la resolución 300 del 1 de agosto de 2024, el presidente Gustavo Petro dio vía libre para que se adelante un espacio de conversación entre el Gobierno de Gustavo Petro y representantes de las Autodefensas Conquistadores de la Sierra (Acsn), grupo armado que delinque en el Caribe colombiano. Si bien el diálogo es un camino para la construcción de la paz, se hace un llamado urgente para que estas conversaciones no desatiendan la protección de los derechos fundamentales de las comunidades indígenas y rurales de la región. La búsqueda de la paz no debe darse a expensas de la justicia ni del respeto a la vida y la dignidad de los pueblos originarios.
«Expresamos nuestro más sentido pésame a la familia de Wilfrido Segundo Izquierdo y a la comunidad Arhuaca en estos momentos de dolor. Reafirmamos nuestro compromiso con la defensa de los derechos humanos y la promoción de la paz en nuestra región. Su memoria vivirá en cada esfuerzo por la paz, la justicia y el respeto a la vida que continuemos adelante», finalizaron.
