Columnistas
Faltan seis meses del Gobierno Duque
Por: Cecilia López Montaño
Muchos colombianos agotados de tantas malas noticias, de tanta corrupción en contratos, de esta increíble feria de puestos parea los amigos en el supuesto gobierno sin mermelada, afirman que no más críticas, que solo le faltan seis meses a este gobierno. A pesar de entender el cansancio esta es una actitud muy peligrosa. La verdad es que el presidente Duque y su gobierno siguen actuando como si llegar al poder fuera equivalente a ganarse la lotería. Es decir, poder hacer lo que les parece sin que les importe la opinión además porque tienen medios que les abren las puertas a ellos y a su séquitos, para justificar y aun alabar todo lo que hacen.
El ministro de Hacienda sigue engolosinado con el crecimiento de la economía, pero ni se sonroja por la increíble inflación especialmente de alimentos que tiene a los pobres y vulnerables contra la pared y al resto ajustando presupuestos. Obvio, solo no se inmuta ese 1% super rico que el gobierno consiente. Al ministro de Trabajo no le importa el tema del crecimiento sin empleo y cree que todo se resolvió con esa Misión de Empleo solo apoyada por los colegas de Levy, su director, que no tiene propuestas viables y su diagnóstico es limitado. La ministra de Educación que es otra que vive en las nubles no escucha el desastre del Programa de Alimentación Escolar, PAE, como si no fuera su responsabilidad, ni tampoco las escuelas públicas rurales e inclusive urbanas, destruidas, sin infraestructura para cumplir su mandato de volver a la presencialidad. La vicepresidenta y el Ministro de Agricultura no entienden que la inseguridad alimentaria de Colombia en estos momentos y en el futuro es un drama y creen que con descalificar a la FAO se acabó el hambre en Colombia.
La Cancillería que maneja Duque a su antojo, sigue costándole un dineral al país al nombrar diplomáticos ad-portas de irse este gobierno, con costos que ya se estiman en varios cientos de millones de pesos. Además, acabando con la carrera diplomática simplemente para lograr eso sí, un millón de amigos como Roberto Carlos quienes se irán solamente de paseo por el mundo por unos cuantos meses además sin costo y con ingresos en dólares o euros.
Seguirán los contratos de Mindefensa con sus amigas, que en las narices nuestras siguen obteniendo nuestra plata para hacer cosas inocuas. Y así podríamos seguir indefinidamente sin nombrar a ese ministro de Interior que no aparece, con los funcionarios acusados de plagio y los demás. Es decir, seis meses son mucho tiempo para seguir haciéndole mucho daño al país. De manera que no podemos bajar la guardia y literalmente tirar la toalla cuando el presidente Duque puede terminar de salirse con la suya y dejar a este país y a quien llegue a la presidencia, en una situación aún peor de la que tenemos hoy en día. Estamos dejando al ratón cuidando el queso porque así lo demuestran los hechos. No es oposición es realidad.