Reactivaron las visitas de hombres en la Cárcel ‘Rodrigo de Bastidas’

Luego de dos años de pandemia, se reactivó el ingreso de hombres a la Cárcel ‘Rodrigo de Bastidas’. Estas visitas están habilitadas para los sábados y domingos, cada 15 días por el protocolo de bioseguridad, y también se permitió la entrada de menores de edad al penitenciario; así lo dio a conocer una fuente quien pidió reservar su identidad.

Según lo informado por la fuente, el tiempo de suspensión y restricción de las visitas de los hombres permaneció por dos años por el tema de Covid-19. El ingreso de los hombres se empezó a reanudar entre febrero y marzo del presente año.

Hace 15 días se autorizó por parte de la Dirección General del INPEC las visitas a menores de edad.

Sin embargo, la situación que se reflejó en la parte psicológica de los privados de la libertad al no poder ver a sus familiares, los afectó un poco y los aisló de su núcleo familiar y seres queridos.

“Se les dio acompañamiento psicológico por parte del personal de atención y tratamiento; además, continuaban con sus actividades de estudio y trabajo. Entre ellos hicieron algo gratificante, se acogieron a la mano de Dios, eso les ayudó muchísimo a superar el tema de las depresiones y desequilibrios emocionales”, manifestó la fuente.

Por otra parte, la Institución trató de seguir realizando las actividades cotidianas con la mayor normalidad que se permitía cumplimiento a los protocolos de bioseguridad.

La fuente también se refirió al desarrollo del primer encuentro luego que se reactivaron las visitas. “Hicieron unas brigadas de aseo, todos estaban bien cambiados, fueron encuentros muy emotivos”.

Un recluso de la Cárcel Rodrigo de Bastidas manifestó que se siente contento porque luego de dos años pudo ver a su hermano: «tenía sentimientos encontrados porque hace dos años que no veía a mi hermano y como de paso estábamos peleados, no sabía si él me iba a visitar a la cárcel. Me puse feliz cuando lo vi, eso me dio moral para seguir adelante y querer salir de la situación en la que estoy. También me sentía triste por las condiciones en las que me vieron, no estoy bien de salud, desde que llegué aquí cada vez estoy peor por todo lo que vivo en los patios; me dio un poco de pena que me vieran así. De igual forma, la visita que me hizo mi hermano me sirvió para reconciliarme con él y estar más tranquilo», dijo.

Por último, la obra civil de los nuevos pabellones de la Cárcel Distrital está casi lista, solo faltan algunas adecuaciones como los acabados y el tema de seguridad. Cabe resaltar, que esta construcción no es para ampliar cupos ni tampoco para recibir más población privada de la libertad.

“El establecimiento penitenciario tiene cupo para albergar 312 personas; al día de hoy tiene 735, los modulares traen 500 cupos; cuando se termine esa obra, lo ideal sería distribuir la población de hacinamiento”, puntualizó la fuente.