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Metrópolis

Estudiantes enfrentan la furia del río para ir al colegio en Puerto Mosquito

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En estos últimos días, en las redes sociales se hizo viral un video en el cual se ve cómo una niña, vestida con uniforme, debe colgarse de una tirolesa improvisada para cruzar un agresivo río y poder llegar a su salón de clases.

La denuncia fue hecha la señora Erika López, vicepresidenta de la Junta de Acción de la vereda El Canal, en Puerto Mosquito, e integrante de la comunidad indígena Narakajmanta, asentada en la jurisdicción de Gaira. OPINIÓN CARIBE llegó hasta el citado lugar, en donde logró contactar a la mujer que día a día expone su vida y la de sus hijos, para llegar al IED Mosquito.

Ante las cámaras del medio, explicó que desde hace 12 años esta situación es su diario vivir siempre que llega la temporada de lluvias, debido a que esto conlleva al aumento de los niveles del río y no los deja cruzar caminando a través del agua.

A la guaya, que se convierte en su principal vehículo, la comunidad le adaptó un chinchorro en donde meten a los niños pequeños, mientras los papás se guindan en la parte de abajo para pasar.

“Esos niños todos tienen que atravesar para poder ir a su cotidianidad, como las escuelas y todos los programas de Gobierno en los que están participando ahora mismo. Somos 8 familias que nos encontramos del otro lado del río sufriendo esta situación y somos aproximadamente 15 o 16 personas”, explica la señora Érika.

Así mismo, asegura que ahora, luego de conocerse la grabación, es que este tema ha llamado la atención de la prensa y de los funcionarios de la administración distrital, que en la mañana de este miércoles hicieron presencia en la vereda, en conjunto con una comitiva de ediles.

“Esa guaya ya está bastante oxidada y deteriorada, una vez pasando por ahí se nos partió por la mitad del río y gracias a Dios que estoy echando la historia, porque el río no tuvo esa creciente que suele tener y logramos salir por la parte de abajo, pero se hubiesen niños los que estuviesen ahí, se hubiesen muerto”, cuenta la mujer.

La lideresa menciona, además, que las autoridades locales tienen pleno conocimiento de lo que allí ocurre, pero reitera que no dan una respuesta contundente para evitar que los estudiantes sigan exponiendo su vida.

“Cuando las cosas se hacen de corazón se busca la forma de hacerlo para que esto no siga sucediendo, y ese es el poco interés que nosotros vemos como indígenas y como líderes de la comunidad, que no ha habido por parte de la administración”, asegura.

Ante las cámaras, deja un mensaje contundente a los entes gubernamentales: “Por favor que el cambio se dé en los sectores rurales también, nosotros somos una parte fundamental para lo urbano, porque aquí está la nutrición de la ciudad, entonces que por favor también se pongan la mano en el pecho y vean que aquí hay humanos también. No queremos que digan que en el Gobierno de tal periodo hubo una tragedia por negligencia y por no actuar cuando se debió hacerlo”.

Al respecto, se pronunció esta mañana la alcaldesa de Santa Marta, Virna Johnson, asegurando que su administración ya dio inicio a las gestiones pertinentes para darle inicio una obra que permita solucionar esta problemática.

Este miércoles, se trasladaron hasta el lugar los Gerentes de Infraestructura del Distrito y del Magdalena, en compañía de un grupo de delegados, que, acorde con las declaraciones de la mandataria, debían verificar las características del sitio para poder hacer estudios topográficos y lo que esto conlleve, en aras de conocer los costos que tendría la construcción de un puente.

“Con la gobernación del departamento estamos actuando de manera inmediata (…) se van a unir las dos gerencias para solucionar este inconveniente de manera muy rápida”, concluyó la mandataria.