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¿Qué es el Demonio de Laplace?
Por Edgar Romero Vásquez, MScEE (Master of Sciences in Electrical Engineering), Ph. D
¿Qué es el Demonio de Laplace?
https://psicologiaymente.com/cultura/demonio-de-laplace
Explicamos este concepto filosófico que intenta determinar la realidad con base en predicciones.
La búsqueda de certidumbre y la ilusión de saber qué es lo que pasará el día de mañana es algo que ha acompañado las reflexiones filosóficas y las prácticas científicas a lo largo del tiempo.
Si pudiéramos tener la certeza de que el día de mañana lloverá, o estallará una guerra, las decisiones que tomaríamos hoy seguramente serían muy distintas a las que elegiríamos sin conocimiento del futuro. El Demonio de Laplace es un personaje que representa muy bien todo esto, ¿de dónde surge?
El Demonio de Laplace y el problema de la predicción
La ilusión de predecir y controlar lo que nos rodea es un tema que podemos encontrar en buena parte del desarrollo científico. Por ejemplo, la mecánica clásica se fundamentó en la idea de que todo lo que existe en el universo y la naturaleza, se puede conocer por medio del razonamiento lógico matemático, así como a través de un sistema geométrico para medir y predecir lo que ocurrirá.
En otras palabras, la mecánica clase parte de considerar que el universo y la naturaleza están regidos por una serie leyes iniciales que pueden pueden ser desveladas por los seres humanos para su modificación.
Por ejemplo, la astronomía moderna en Occidente, inaugurada por Newton, tiene como antecedente dicha postura.
¿Quién fue Pierre Laplace?
Pierre Laplace fue un astrónomo, físico y matemático francés que vivió de 1749 a 1826. Se le atribuye el desarrollo de la mecánica celeste, trabajó de la mano de Isaac Newton y Galileo en la predicción de eclipses y en el descubrimiento de nuevos planetas. Participó también en el estudio de algunas moléculas de gas y de partículas atómicas.
Lo que Laplace sugirió a partir de su conocimiento es que, a través de la ciencia, podemos prever y adivinar la actividad de todos los sistemas de comportamiento que existen. Y en caso de que no, la imprevisibilidad sería solo un error del conocimiento que como tal, puede ser corregido.
En la concepción determinista de Laplace todo puede ser predicho, y si no es así, es porque el conocimiento producido por el ser humano ha errado o no es suficiente.
Lo que esto quiere decir es que todo lo que existe en el universo se encuentra estructurado de manera previa e independiente a la actividad de los seres humanos, con lo cual nuestras propias acciones y todo lo que somos estaría predeterminado por las leyes del universo.
El demonio determinista (de Laplace)
El Demonio de Laplace es un personaje imaginario que tiene la facultad de conocer las propiedades iniciales de todas las partículas de la naturaleza y del universo, con tal precisión, que puede aplicar las leyes naturales para adivinar lo que ocurrirá al instante o bien, en mucho tiempo; desde un movimiento preciso hasta una obra de arte (Calabrese, 1999).
En otras palabras, el Demonio de Laplace es un demonio determinista y todopoderoso, un ser que es exterior al universo y que ha predicho y decidido cada cosa que ocurrirá en la naturaleza, incluyendo por supuesto, la actividad de los seres humanos.
La lógica de la predicción no solo fue trascendental en la astronomía, las ciencias de la física, las matemáticas y las ciencias naturales, sino que se ha extendido hacia el estudio del comportamiento humano así como hacia su intervención.
Por ejemplo, ha estado presente en el desarrollo de la medicina moderna, e incluso podríamos ver cómo impactó la forma tradicional de hacer ciencias humanas, así como la actividad económica y financiera. No obstante, a partir del desarrollo de nuevos paradigmas científicos, el Demonio de Laplace se ha encontrado con algunos límites.
Del determinismo al indeterminismo: el fin de la certidumbre
La lógica de la predicción tuvo un especial éxito mientras se entendía el universo en términos de sistemas lineales, asentados en una relación estable causa-efecto. Pero, cuando llegaron la teoría del caos y la mecánica cuántica a desafiar la linealidad de todos los sistemas, el campo científico también cuestionó la insistencia de aplicar la lógica de la predicción en todo lo que conocemos.
A muy grandes rasgos y entre otras cosas, hubo un cambio de paradigma a partir de considerar que en los sistemas no lineales (que son los sistemas complejos, de comportamientos caóticos y no cíclicos, como en los seres humanos), el estado inicial no es igual al estado final ni lo determina, con lo cual, son sistemas que no puede ser predichos.
En el terreno de la ciencia, el universo y la naturaleza en general dejan de ser concebidos como un conjunto de leyes de cobertura general, preestablecidas por un ser exterior. Así es cómo a partir de los inicios del siglo XX, hay un giro importante donde se considera que, AUNQUE ES POSIBLE CALCULAR PROBABILIDADES, SIEMPRE PUEDE HABER FALLAS DE PREDICCIÓN. A partir de esto, algunos autores consideran que se inaugura una época marcada por el fin de la certidumbre, sobre todo en las ciencias humanas y sociales.
Referencias bibliográficas:
- Trainini, J. (2003). Hacia la necesidad de un nuevo paradigma médico. Revista Argentina de Cardiología, 71(6): 439-445.
- Calabrese, J. L. (1999). Ampliando las fronteras del reduccionismo. Deducción y sistemas no lineales. Psicoanálisis APdeBA, XXI (3): 431-453.
- Wallerstein, IM (1999). Las ciencias sociales y las humanidades en los umbrales del siglo XXI. El fin de la certidumbre en las ciencias sociales. UNAM: México.
Psicóloga | Redactora especializada en Psicología Social
Licenciada en Psicología por la Universidad de las Américas Puebla (México). Máster en Investigación e Intervención Psicosocial por la Universitat Autònoma de Barcelona, con experiencia profesional en inclusión social y educativa, así como docencia en psicopedagogía. Cuenta con estudios en política pública y derechos humanos y actualmente es doctora en Psicología Social en la Universitat Autònoma de Barcelona, donde trabaja temas relacionados con metodologías cualitativas, salud pública, salud mental, diversidad funcional y perspectiva de género.
https://es.wikipedia.org/wiki/Demonio_de_Laplace#Teor%C3%ADa_del_caos
Demonio de Laplace
En la historia de la ciencia, el demonio de Laplace es la primera articulación publicada de determinismo causal o científico por Pierre-Simon Laplace en 1814.1 Según el determinismo de Laplace, si alguien (el Demonio) supiera la ubicación precisa y momento de cada átomo en el universo, sus valores pasados y futuros para cualquier tiempo dado serían deducibles de esos datos; podrían ser calculados de las leyes de mecánica clásica.2
Su deseo de confirmar o refutar el demonio de Laplace jugó una función motivadora [cita requerida] en el desarrollo subsiguiente de la termodinámica estadística, la primera de varias objeciones desarrolladas por generaciones posteriores de físicos a la suposición de determinismo causal sobre la que se erigió el demonio de Laplace.
Introducción
Esta idea es a menudo llamada demonio de Laplace (y a veces superhombre de Laplace). Laplace mismo no utilizó la palabra «demonio». En cambio, se refirió a esta entidad como «Une intelligence… Rien ne serait incertain pour elle, et l’avenir, comme le passé, serait présent à ses yeux.» («Una inteligencia (…) Tal que para ella nada sería incierto y el pasado, al igual que el futuro, serían presente ante sus ojos»).
Aparentemente, Laplace no fue el primero en imaginar tal demonio y pasos muy similares pueden ser hallados décadas antes del Essai philosophique de Laplace en el trabajo de becarios como Nicolas de Condorcet y Barón D’Holbach.3 Aun así, parece que el primero que ofreció la imagen de una inteligencia superpoderosa fue Roger Joseph Boscovich, cuya formulación del principio de determinismo en su Theoria philosophiae naturalis de 1758 resulta no sólo ser cronológicamente anterior a Laplace sino también (al estar fundada en menos principios metafísicos y más arraigada y elaborada sobre suposiciones físicas) más precisa, completa y comprensible que la explicación de Laplace de la doctrina.4
En la historia de la ciencia, el demonio de Laplace es la primera articulación publicada de determinismo causal o científico por Pierre-Simon Laplace en 1814.1 Según el determinismo de Laplace, si alguien (el Demonio) supiera la ubicación precisa y momento de cada átomo en el universo, sus valores pasados y futuros para cualquier tiempo dado serían deducibles de esos datos; podrían ser calculados de las leyes de mecánica clásica.2
Su deseo de confirmar o refutar el demonio de Laplace jugó una función motivadora [cita requerida] en el desarrollo subsiguiente de la termodinámica estadística, la primera de varias objeciones desarrolladas por generaciones posteriores de físicos a la suposición de determinismo causal sobre la que se erigió el demonio de Laplace.
Introducción[editar]
Esta idea es a menudo llamada demonio de Laplace (y a veces superhombre de Laplace). Laplace mismo no utilizó la palabra «demonio». En cambio, se refirió a esta entidad como «Une intelligence… Rien ne serait incertain pour elle, et l’avenir, comme le passé, serait présent à ses yeux.» («Una inteligencia (…) Tal que para ella nada sería incierto y el pasado, al igual que el futuro, serían presente ante sus ojos»).
Aparentemente, Laplace no fue el primero en imaginar tal demonio y pasos muy similares pueden ser hallados décadas antes del Essai philosophique de Laplace en el trabajo de becarios como Nicolas de Condorcet y Barón D’Holbach.3 Aun así, parece que el primero que ofreció la imagen de una inteligencia superpoderosa fue Roger Joseph Boscovich, cuya formulación del principio de determinismo en su Theoria philosophiae naturalis de 1758 resulta no sólo ser cronológicamente anterior a Laplace sino también (al estar fundada en menos principios metafísicos y más arraigada y elaborada sobre suposiciones físicas) más precisa, completa y comprensible que la explicación de Laplace de la doctrina.4
Argumentos en contra del demonio de Laplace
Irreversibilidad termodinámica[editar]
Según el ingeniero químico Robert Ulanowicz, en su libro de 1986 Crecimiento y Desarrollo, el demonio de Laplace conoció su fin con el desarrollo a comienzos del siglo XIX de los conceptos de irreversibilidad, entropía y la segunda ley de termodinámicas. En otras palabras, el demonio de Laplace estaba basado en la premisa de la reversibilidad y la mecánica clásica; aun así, Ulanowicz señala que muchos procesos termodinámicos son irreversibles, de modo que si las cantidades termodinámicas se toman como puramente físicas entonces no es posible tal demonio pues uno no podría reconstruir momentos y posiciones pasados del estado actual. La termodinámica de entropía máxima tiene un punto de vista muy diferente, considerando que las variables termodinámicas tienen una base estadística que puede ser pensada de forma separada de la física microscópica.5
Irreversibilidad mecánica cuántica[editar]
Debido a su suposición canónica de determinismo, el demonio de Laplace es incompatible con la interpretación de Copenhague, que estipula un indeterminismo ontológico. La interpretación de la mecánica cuántica está todavía abierta al debate y hay varios que toman posturas opuestas (como la interpretación de los varios mundos y la de Broglie-Bohm).6
Teoría del caos[editar]
La teoría del caos es a veces tomada como contradictoria con el demonio de Laplace: describe cómo un sistema determinista puede empero exhibir un comportamiento imposible de pronosticar. Como en el efecto mariposa, variaciones menores entre las condiciones iniciales de dos sistemas pueden resultar en diferencias significativas entre ellos.7 Si bien explica la imposibilidad de predecir un sistema en casos prácticos, aplicarlo al caso de Laplace es cuestionable: bajo la hipótesis de demonio todos los detalles son sabidos con infinita precisión y por lo tanto las variaciones impredecibles en las condiciones iniciales de un sistema son inexistentes.
EL ESTUDIO DE LA ECUACIÓN LOGÍSTICA DENTRO DE LA TEORÍA DEL CAOS ES OTRO ARGUMENTO EN CONTRA DEL DEMONIO DE LAPLACE (APLICACIÓN LOGÍSTICA COMPORTAMIENTO SEGÚN DISTINTOS VALORES DE «R» · CERCA DE 3,57 ES EL INICIO DEL CAOS). Ver Esta ecuación cambiará tu modo de ver el mundo
Diagonalización de Cantor[editar]
En 2008, David Wolpert utilizó el Argumento de la diagonal de Cantor para refutar el demonio de Laplace. Para hacerlo, supuso que el demonio es un dispositivo computacional y mostró que no es posible que entre dos dispositivos uno prediga totalmente al otro.89 Si el demonio no fuera contenido y computado por el universo, cualquier simulacro certero del universo sería indistinguible del universo para un observador interno y el argumento se sostendría a pesar de lo observable[cita requerida].
Opiniones recientes[editar]
Recientemente se ha propuesto que existe un límite en el poder computacional del universo, es decir la capacidad del demonio de Laplace para una cantidad infinita de información. Este límite está basado en la entropía máxima del universo, la velocidad de la luz y la cantidad mínima de tiempo necesario para mover información a través de la longitud de Planck y la cifra resulta ser aproximadamente 10^120 bits.10 Consiguientemente, cualquier cosa que requiera más que esta cantidad de datos no puede ser computada en la cantidad de tiempo que ha sucedido hasta ahora en el universo.
Otra teoría sugiere que, si el demonio de Laplace ocupara un universo paralelo o dimensión alternativa desde la que pudiera determinar los datos pertinentes y hacer los cálculos necesarios en un tiempo y espacio mayor, la limitación de tiempo antedicha no sería tal. Esta posición es explicada en El Tejido de la Realidad por David Deutsch.
- Demonio de Maxwell El demonio de Maxwell es el nombre de una criatura imaginaria ideada en 1867 por el físico escocés James Clerk Maxwell capaz de violar la segunda ley de la termodinámica. Forma parte de un experimento mental diseñado para ilustrar la validez de la segunda ley de la termodinámica. Esta ley prohíbe que entre dos cuerpos a diferente temperatura se pueda transmitir el calor del cuerpo frío al cuerpo caliente. La segunda ley también se expresa comúnmente afirmando: «En un sistema aislado la entropía nunca decrece»
Referencias[editar]
- ↑Hawking, Stephen. «Does God Play Dice?». Public Lectures. Archivado desde el original el 11 de enero de 2012. Consultado el 24 de julio de 2016. “our ability to predict the future is severely limited by the complexity of the equations”, and the fact that they often have a property called chaos
- ↑Pierre-Simon Laplace, «A Philosophical Essay on Probabilities» (full text).
- ↑Marij (2014). «On the origins and foundations of Laplacian determinism». Studies in History and Philosophy of Science 45: 24-31. doi:1016/j.shpsa.2013.12.003.
- ↑Kožnjak Boris (2015). «Who let the demon out? Laplace and Boscovich on determinism». Studies in History and Philosophy of Science 51: 42-52. doi:1016/j.shpsa.2015.03.002.
- ↑http://bayes.wustl.edu/etj/articles/theory.1.pdf
- ↑http://arxiv.org/pdf/1303.2719v1.pdf
- ↑Stanford Encyclopedia of Philosophy, «Causal Determinism»
- ↑David H. Wolpert (2008). «Physical limits of inference». Physica D 237 (9): 1257-1281. arXiv:1362. doi:10.1016/j.physd.2008.03.040.
- ↑-M. Binder (2008). «Theories of almost everything». Nature455 (7215): 884-885. doi:10.1038/455884a.
- ↑Physical Review Focus (24 de mayo de 2002). «If the Universe Were a Computer». APS.
VER IMÁGEN- El Demonio de Laplace, explicación fácil, por explainers tv:
https://www.youtube.com/watch?v=hY2nk0Y3SmU
https://flashbackconnect.com/Default.aspx?id=h5LBzQO23jbDlwDj-BJPBw2