Departamento
Pivijay, Magdalena, bajo la amenaza criminal

La ola de violencia en Pivijay, Magdalena, ha dejado al menos cinco muertos y múltiples heridos en el primer trimestre de 2025. Ataques sicariales y mensajes de grupos armados han intensificado el terror en la población, que reclama mayor seguridad y acción estatal ante la creciente guerra territorial entre bandas criminales.
Por: Arnol Sarmiento
Pivijay, Magdalena, se ha convertido en uno de los municipios más afectados por la violencia en el departamento durante el primer trimestre de 2025. Según reportes, al menos cinco personas han perdido la vida en una serie de homicidios relacionados con una aparente territorial entre bandas criminales que operan en la zona.
Uno de los episodios más recientes ocurrió en la mañana de este viernes, cuando dos hombres, identificados como Camilo Andrés Borja Mozo y Francisco Vargas, resultaron heridos tras un ataque sicarial en el sector conocido como Los Locos. Este hecho ha encendido aún más las alarmas entre los habitantes, quienes exigen una mayor presencia de las autoridades para garantizar su seguridad.
A esto se suman las víctimas de hechos anteriores, entre ellas Oswaldo Yancy Pallares, alias ‘El Búho’; José García Barranco; Ayder Hernández, conocido como ‘El Nene Gallero’; Eduardo Luis Mercado Ramírez, alias ‘El Tata’; y Yasir Hernández Pacheco. En varios de estos casos, los cuerpos fueron hallados con mensajes en los que grupos armados ilegales que operan en la región se atribuyen los crímenes, en una aparente medida de intimidación y control territorial.
La comunidad de Pivijay, históricamente afectada por la presencia de grupos delictivos, ha manifestado su preocupación y ha hecho un llamado urgente a las instituciones del Estado para que intervengan y refuercen la seguridad en el municipio. Los habitantes aseguran que la situación se ha vuelto insostenible, con ataques constantes que han sembrado el miedo en la población.
Las autoridades locales han anunciado que se están implementando operativos especiales para capturar a los responsables de estos hechos y desmantelar las estructuras criminales que operan en la zona. Sin embargo, los residentes insisten en que estas medidas no son suficientes y exigen una estrategia integral que garantice su protección.
