Columnistas
Santa Marta continua en el ranking de las más violentas del mundo

Por: Lerber Dimas Vásquez.
La ciudad entró por primera vez en esa calificación en el 2012 y, se sigue sosteniendo, lo cuál es un tema de suma preocupación. Llama poderosamente la atención las voces de rechazo y la descalificación al Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal (CCSPJP), de México, quien ha puesto a Santa Marta dentro de esta medición, aduciendo imprecisiones metodológicas. Frente a esto es importante mencionar al menos dos consideraciones. La primera de ellas es que quienes aplaudieron y apoyaron la creación de la Policía Metropolitana de Santa Marta -Mesan- en ese momento, fueron gremios y concejales, de los cuales hoy al menos 3 se sostienen en el recinto y uno es alcalde: la importancia de detallar las discusiones porque los políticos pasan y la segunda, no se miden solo los homicidios.
Coincido en que la jurisdicción de la Mesan no beneficia a la medición que se haga sobre la ciudad, lo cuál en vez de suscitar un rechazo debería por los menos abrir el debate, porque los muertos están y la infraestructura para la seguridad es muy deficiente, casi que nula. De esto nadie ha dicho nada. Pero no solamente es la jurisdicción: es la derogada articulación política entre el distrito; su área metropolitana y el departamento, que no existe desde que se creo la Mesan. Por lo tanto, no es culpa de la medición, sino de la miopía y el egoísmo político: la creación de la Mesan no está soportada bajo ningún documento técnico; es más, nunca se ha hecho sobre ella una evaluación (y han pasado cositas) y, definitivamente tiene que dejar de ser la ruta final de la carrera pensional de algún oficial o la proyección laboral en por lo menos Consejerías de Seguridad.
Pero, hablemos del informe que menciona 328 homicidios[1]. Ni siquiera son los 340 que sumó Medicina Legal. Son los números de la Mesan y aquí, como se explicó en otra columna[2] dejan varios sin contabilizar, lo que debe ser objeto de discusiones posteriores porque si no se tienen una unificación de criterios frente a lo cuantitativo va a ser muy difícil estudiar y estabilizar la problemática. La población tienen una pequeña variación pero no altera la Tasa. Ahora, si la preocupación es por la “imagen” de la ciudad frente al turismo, pues es un discurso medio ausente de lo nacional y lo internacional: la ciudad ha estado incluso militarizada y eso no ha bajado el turismo o los turistas no fueran al Rodadero por lo que pasa en Gaira.
Entonces los gremios económicos, quienes paradójicamente no se pronunciaron frente a la limpieza social, ni sean pronunciado frente a las toneladas de cocaína incautadas en el puerto, ni cuando han asesinado a personas en condición de habitabilidad de calle porque afean la ciudad como los casos de la Avenida del Río, ni la muerte y estampida contra los “tirapiedras”, ni la abstinencia del alcalde de hacer cualquier publicación en sus redes sociales sobre la “Paz Total”, ni mucho menos el sentarse a pensar porque nadie informó sobre el “grupo de la muerte” pese a la jugosa recompensa de $1.000 millones de pesos y que desapareció como por arte de magia. Pero si salen a descalificar un informe que usa la base de medición que en su momento alguien propuso y estuvieron muy de acuerdo.
Santa Marta está en ese ranking y eso no lo van a resolver con demagogia o rechazos y es una pena que la ciudad llegara a esta medición en el marco de sus 500 años, pero hay realidades que no se pueden ocultar y la falta de decisiones políticas, no solo de este gobierno, sino de todos los que lo antecedieron es la sumatoria de los problemas que han agravado la seguridad.
Si lo que se quiere es revertir el informe se debe trabajar en varias líneas. a) revisar estratégicamente la jurisdicción de la Mesan así esto implique un mayor reto. Esto es fortalecer lo rural y lo urbano de la Sierra Nevada de Santa Marta; las áreas metropolitanas desde Pueblo Viejo hasta Zona Bananera, gran reto porque se puede pasar del puesto 26 a estar dentro de los primeros 10, pero ordenar la seguridad implica decisiones político-administrativas. Esto quiere decir que habría que poner un puesto de control robusto en Tasajera (Mesan) y otro en la entrada de Sitio Nuevo (Demag). La jurisdicción del Parque Vía Isla de Salamanca recaería sobre la departamental y Zona Bananera sobre la Mesan. Así por lo menos no habría tantos saltos jurisdiccionales, en un departamento ruralizado y se podría pensar una estrategia conjunta policía-ejercito, para la Sierra Nevada, Santa Marta-Ciénaga, sin los limites territorial que no respetan los actores armados ilegales. Así mismo una estrategia urbana de la Mesan para Santa Marta-Ciénaga-Zona Bananera-Pueblo Viejo, lo cual delimitaría responsabilidades y aquí si estamos hablando de un Plan Maestro de Seguridad para los 500 años.
- b) la Mesan no puede estar en manos de un Coronel. Se necesita de un Oficial General, que le de estabilidad, sostenibilidad y le imprima interlocución. Esto de condecoraciones y reconocimientos, aun cuando las cosas van muy mal hay que frenarlo. Se necesita un Concejo que norme, resuelva, y fiscalice, no que envíe un cuestionario de 50 preguntas cuyas respuestas puedan inferir una respuesta negativa o positiva (si/no) y que no trascienda nada de ahí.
- c) hay que adelántese a la iniciativa de ciudad 4.0. Aprovechen el espaldarazo del Gobierno Nacional con la construcción del Centro de Datos donde juega un papel importante la Inteligencia Artificial. Rodéense de los mejores; déjenlos trabajar y dejen de creerse que se la saben toda, que por esa arrogancia la ciudad está como está. Incluya esto dentro de su Plan Maestro y así se podrían ver más seudo-europeos, al menos en pensamiento y en la búsqueda de soluciones basada en la tecnologías.
- d) incluyan a la Paz Total dentro de ese Plan Maestro. Son 6 décadas de conflicto. Ya está bueno. Y delimiten lo urbano de lo rural; incluyendo sus zonas metropolitanas que juegan un papel determinante en la sostenibilidad y la estabilización del territorio y apliquen ese Plan Integral de Seguridad y Convivencia, que como dijo el secretario: Santa Marta va a tener no un plan de seguridad y convivencia. El mejor Plan de Seguridad y Convivencia.
Finalmente, la medición no es el problema. El problema es la falta de decisión política para afrontar temas de ciudad. Reconozco que no se puede ordenar la casa tan fácilmente y más cuando han imperado condiciones sociales, económicas y decisiones politiqueras. No vayan a oficiar al Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal (CCSPJP), de México, para pedirle que rectifique, no vayan a pasar esa vergüenza. Mejor acepten el garrotazo y metan a la ciudad y sus áreas metropolitanas dentro de un verdadero Plan Maestro de seguridad 500 años, con inversión, con metas y con decisiones conjuntas.
[1] Ver: Ranking 2024 de las 50 ciudades más violentas del mundo. https://geoenlace.net/seguridadjusticiaypaz/archivo/b1b217_cf69256dd8.pdf
[2] Ver: Elementos de análisis de la inseguridad en Santa Marta. https://www.opinioncaribe.com/2025/01/02/elementos-de-analisis-de-la-inseguridad-en-santa-marta/
